Cada año, durante la temporada de lluvias, el noreste de Tailandia acoge un desfile especial. Desde finales de agosto hasta principios de octubre, miles de turistas acuden a las riberas de los ríos de la región para echar un vistazo a la procesión nocturna, pero esta cabalgata no incluye las intrincadas figuras de cera talladas del Festival de las Velas de Ubon Ratchathani ni las explosiones del Festival de Cohetes Bun Bang Fai. En cambio, se trata de un desfile de camarones.

Comportamiento de desfile del camarón de desfile (Macrobrachium dienbienphuense)

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Durante décadas, los lugareños han sabido que estos camarones salen del agua y marchan por las orillas rocosas del río. Hay estatuas, cuentos populares e incluso danzas enteras dedicadas a los crustáceos. El biólogo de peces Watcharapong Hongjamrassilp oyó hablar de los camarones desfilando durante su infancia en Bangkok, pero a medida que avanzaba su investigación comenzó a preguntarse si los científicos realmente habían estudiado este fascinante fenómeno natural.

“Me di cuenta de que no sabíamos nada sobre esto”, le dice Hongjamrassilp, ahora estudiante de posgrado en la Universidad de California en Los Ángeles, a Elizabeth Preston del New York Times . En la literatura científica no había prácticamente nada sobre qué tipo de camarones eran o por qué abandonaban el agua para desplazarse río arriba.

Como científico, Hongjamrassilp se sintió motivado a llegar al fondo de lo que estaba sucediendo con estos camarones, pero su conexión con Tailandia y su gente también lo atrajo de regreso. “Quería hacer un proyecto que pudiera ayudar a la gente de Tailandia y, al mismo tiempo, ayudar al medio ambiente”, le dice a Jake Buehler de National Geographic .

Hongjamrassilp y sus colegas pasaron dos temporadas observando y documentando cómo cientos de miles de camarones de agua dulce emergían del río Lamdom de Tailandia y caminaban sobre la tierra. Ahora, Hongjamrassilp es el autor principal de un nuevo artículo publicado el mes pasado en el Journal of Zoology que describe el fenómeno.

Según National Geographic , los investigadores creen que estos camarones realizan su peligroso viaje en tierra, donde corren el riesgo de convertirse en alimento para ranas, serpientes e incluso arañas, para escapar de las corrientes más fuertes del río.

Según el Times, algunos camarones viajaron casi 20 metros río arriba y pasaron más de 10 minutos fuera del agua. “Me sorprendió mucho”, le dice Hongjamrassilp al Times . “Nunca pensé que un camarón pudiera caminar tanto tiempo”.

Para investigar qué hacía que los diminutos camarones salieran del agua, los investigadores llevaron los crustáceos al laboratorio. Después de dos años de ajustes al experimento, el equipo finalmente logró que los camarones salieran del agua, según National Geographic . Resultó que aumentar la velocidad de la corriente y usar agua directamente del río fueron claves para inducir este comportamiento único en un entorno de laboratorio. Los investigadores también descubrieron que la oscuridad y las temperaturas más frías también eran señales importantes para que los camarones se dirigieran a terrenos más altos.

Finalmente, el análisis genético de los camarones que desfilaban reveló que se trataba de Macrobrachium dienbienphuense , según el Times .

Lo que sigue siendo un misterio es por qué exactamente los camarones están dispuestos a arriesgarlo todo para ir río arriba. Peter Novak, un ecologista de agua dulce del Departamento de Biodiversidad, Conservación y Atracciones de Australia Occidental que no participó en el estudio, le dijo a National Geographic que los hallazgos “plantean preguntas interesantes sobre por qué estos animales se están moviendo río arriba si no hay necesidad de ir río abajo en primer lugar”.

En una entrevista con el Times , Alan Covich, un ecologista de la Universidad de Georgia que no participó en la investigación, dice que lo que más le sorprendió fue la cantidad de turistas que atrae el desfile de camarones. “Tenemos festivales de cangrejos de río, tenemos todo tipo de cosas”, dice, “pero generalmente es gente comiéndolos, no viéndolos moverse”.